Mi experiencia con las Constelaciones:
Mi primera experiencia con las constelaciones fue desde la más absoluta escepticidad. Fue un taller de tres días intensivos donde cada uno de los participantes fuimos aprendiendo como funcionaban y exponiendo un «conflicto» personal para trabajarlo. Fui la única de 20 personas que no pudo terminar su trabajo. Mi odio ante ese conflicto era tan grande que no pude atravesar. Llegué a pensar que todo era un montaje para vender otra de las mil «pseudoterapias» que te venden la felicidad eterna y que por supuesto no funcionan; pero obviamente es absurdo; no se puede contratar a 22 personas (participantes y terapeutas) para convencer solo a una… Pero lo que más me llamó la atención es que la misma noche que realicé la constelación la persona con la que tenía el conflicto desde hacía varios años…¡Me llamó por teléfono! ¡No hablábamos desde hacía meses y esa noche me llamó!
Me llamó con una excusa absurda, por supuesto, pero desde ese momento comencé a sentir que mi odio se iba diluyendo, y poco a poco nos fuimos reencontrando, sin hacer ningún esfuerzo, hasta que un día pudimos hablar fluidamente del tema que nos distanció y desde ahí por fin, tenemos de nuevo una relación de cariño y respeto mutuo.
A partir de ese momento me ayudo de esta herramienta para solucionar y soltar conflictos y situaciones que van apareciendo en mi vida, y lo que me sigue hoy en día «alucinando», es como sin apenas esfuerzo mas allá de realizar la constelación y estar consciente de mi misma y de mi entorno, el cambio se va a produciendo tanto dentro de mi, a nivel mental y emocional, como en mi entorno mas o menos próximo.
Otro ejemplo: Me mantuve en un trabajo que no me aportaba prácticamente nada durante 3 años. Cada vez que intentaba dejarlo, algo me lo impedía, algo irracional, puesto que racionalmente estaba claro que por mi salud y mi integridad tenía que dejarlo. Lo trabajé desde lo racional y desde lo emocional, pero me faltaba algo…un empujón, un «soltar» los miedos que se interponían cada vez que lo intentaba. Trabajé este conflicto en una constelación y dos semanas después aconteció un suceso en el trabajo,un suceso que dicho sea, era muy habitual, nada nuevo; pero en ese momento, me levanté de la mesa de trabajo y como si una energía me impulsara desde dentro me fui hacia los jefes y les dije «Me voy, esto yo no lo aguanto más».
Cuando estaba ya en la calle de vuelta a casa no podía creer lo que había hecho. Los miedos seguían bombardeando mi cabeza, pero una sensación física y emocional de libertad, de bienestar de estar haciendo lo correcto para mi bienestar y mi vida me iba invadiendo cada vez más hasta tal punto que al llegar a casa lo que salió de mi boca con una sensación tremenda de satisfacción y alegría fue ¡Por fin lo he dejado!.
Ni que decir tiene que nunca me he arrepentido de aquel movimiento, y que desde aquel día que pude «soltar», mi vida profesional mejoró muchísimo y por su puesto mi bienestar personal. ¡Y fue así de fácil, de espontaneo!
Mar Reche. Psicóloga y Directora de Psicomundo
Este es el efecto de un trabajo de constelaciones, inexplicable desde lo racional pero totalmente efectivo.
Si estás en una situación de conflicto que necesitas resolver, no lo pienses, ¡inténtalo!¡En una sola sesión! ¿Qué puedes perder? Yo solo te digo y lo puedes comprobar por ti mismo/a que todo el que lo prueba sale maravillado y repite porque simplemente ¡Funciona!.
Por último debo decir desde mi experiencia como profesional de la Psicología que hay determinados casos de conflictos muy arraigados y muy arcaicos que necesitan un complemento de terapia individual además del trabajo en la constelación, pero eso se lo indicará el profesional en constelaciones. Y debo también apuntar que el éxito del trabajo en constelaciones depende en mucha parte (diría casi todo) del profesional con el que se realice el trabajo, por ello antes de utilizar esta poderosa herramienta asegúrese de ponerse en manos de un profesional de verdad, con los estudios requeridos y suficiente experiencia, porque por desgracia las constelaciones se han desvirtuado mucho gracias a ciertos «individuos/as» que se consideran consteladores/as después de haber recibido un cursillo de 3 días. Tenga cuidado en manos de quien confía su salud psicoemocional.